Se asume culturalmente que la gente feliz es antintelectual, superficial o que alucina. Todos hemos escuchado la frase: "la ignorancia es una dicha". La verdad es que la sociedad muestra ignorancia fundamental respecto a la felicidad.
Todos conocemos a alguien brillante e infeliz, así como todos conocemos a alguien exitoso e infeliz. En mi investigación me topo con esta gente, y cuando se les ve, es fácil asumir que la felicidad no tiene nada que ver con el éxito o la inteligencia, y que incluso puede ser su antítesis.
La felicidad es la mayor ventaja en la economía moderna. Solo hasta 25% de nuestro éxito profesional se basa en la inteligencia y habilidades técnicas, aunque la mayoría de las compañías hacen contrataciones basándose en esas categorías. Por otra parte, 75% del éxito de largo plazo se basa en nuestra capacidad para adaptarnos al mundo y ver al estrés como desafío en lugar de amenaza. Al final, la conclusión es clara: lo inteligente es ser feliz.
Shawn Achor
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