Este hotel, hoy llamado "Jardin de Cluny" y perteneciente a una cadena internacional, fue el primero en el que Vargas Llosa se alojó cuando llegó a París por segunda vez, en el verano de 1959, al inicio de una estancia que se prolongaría por casi siete años. En una buhardilla del Wetter, trabajó en el final de su primera novela "La ciudad y los perros". El hotel estaba regentado entonces por la familia Lacroix, que también gestionaba el hotel en el que se alojaba Gabriel García Márquez en París.
"Al preguntarle a Vargas Llosa si fue allí, en el Hotel Wetter, donde terminó La ciudad y los perros, el novelista contesta: Ya tenía el magma, lo había comenzado en Madrid. Pero el gran envión se lo di en el Hotel Wetter, que fue de un año y medio aproximadamente. La novela la terminé en la casa de la rue Tournon, en 1961" (J. J. Armas Marcelo, "Vargas Llosa: el vicio de escribir" Debolsillo, 2008)
"En el verano de 1959 llegué a París con poco dinero y la promesa de una beca. Una de las primeras cosas que hice fue comprar, en una librería del Barrio Latino, un ejemplar de Madame Bovary en la edición de clásicos Garnier. Comencé a leerlo esa misma tarde en un cuartito del hotel Wetter, en las inmediaciones del Museo Cluny".
No hay comentarios:
Publicar un comentario