El psicólogo y gurú espiritual Bernardo Stamateas, una de las figuras locales de la autoayuda, presentó dos volúmenes: "Quereme más. Ideas prácticas para sanar y fortalecer la autoestima" y "Quiero un cambio. Principios para alcanzar tu máximo potencial".
En su libro "Quiero un cambio", Stamateas sostiene que "no es necesario que sean grandes, porque si se cambia el afuera pero no la manera de pensar no cambia nada", explica. "El único cambio que tenemos que hacer es crecer. Todo cambio es parte de la vida, es inevitable, por lo que debemos ser flexibles frente a ellos", escribe en la introducción del libro, publicado por Vergara.
Muchas veces se habla de cambios referidos a lo material, "pero yo me refiero a los verdaderos, los que ayudan al alma, los espirituales", afirma Stamateas.
El escritor –reconocido a partir de que un libro suyo fuera furor en una edición pasada del reality televisivo "Gran Hermano" y se convirtiera en best seller– dice: "Postulo que los cambios hay que hacerlos cuando estamos bien, contrario a lo que se piensa. Por lo general cuando uno está en crisis piensa que es hora de un cambio, pero el mejor momento para hacerlo, por ejemplo, es cuando uno lo tiene, porque está tranquilo; y si en una entrevista te dicen 'no', no te afecta tanto. No prima la ansiedad".
Stamateas asegura que a veces un pequeño cambio sencillo puede resolver un gran problema. En las discusiones de pareja cuidar el tono de voz puede resolver peleas que se sostienen por años. "Suena difícil, pero es posible", reflexiona.
Según el pastor de la iglesia Ministerio Presencia de Dios, "los cambios son inevitables y tenemos que hacernos amigos de ellos porque nos sacan de la zona de confort, de la rutina de hacer lo mismo por años". "Cuando uno tiene un cambio –asegura– especialmente empujados desde el afuera (cambio de trabajo, fin de una pareja o una pérdida) se entra en la zona de ansiedad; pero si se logra manejar bien ese proceso entonces se puede realizar ese cambio sin problemas".
En "Quereme más" (Planeta), su otro lanzamiento del 2011, Stamateas habla de hacer un repaso de cómo está la autoestima de las personas: "Saber donde está parado uno para ver si es necesario un cambio de actitud hacia la autovaloración".
Primero hay que identificar qué es lo que la mente estableció como normal –y no lo es– para luego modificar esa conducta: "Todos tenemos una imagen, una manera de vernos; si es negativa o débil, va a afectar las decisiones de la vida", sostiene.
"El rechazador, el chismoso, el maltratador, el crítico, el celoso, el peleador tienen en común una baja estima, cuando el quererse a sí mismo es la plataforma emocional para comenzar a construir algo", señala. A su juicio, la autoestima se construye paso a paso, el ser humano tiene que quererse un poco más todos los días de su vida, pero no hay que confundir con un amor desmedido hacia uno mismo –el narcisismo–, "sólo con una estima sana se puede vivir en paz y ayudar al otro".
"Si una persona se crió en un ambiente de tristeza o de enfermedad, va a establecer que estar triste, deprimido o enfermo es normal. Seguro que en la vida le van a pasar cientos de cosas buenas pero, consciente o inconscientemente, va a hacer todo lo posible para volver al estado primitivo de pesadumbre, no va a poder disfrutar de un buen momento", ejemplifica.
¿Cómo se sale de esa estructura? "Hay que revisar esos conceptos 'normales' y trocar en positivas las creencias negativas, afirma Stamateas. "Es difícil, pero no imposible, porque cuanto más tiempo estas ideas vivieron en la mente, se torna complicado erradicarlas".
El escritor resume que "muchos dicen 'cuando tenga el auto voy a ser feliz', pero llegan al coche y la mente no les da permiso para disfrutarlo porque la voz interior les repite: 'no te lo mereces'. Propongo un cambio de pensamiento para mejorar la manera de vivir".
(Télam)
No hay comentarios:
Publicar un comentario