domingo, 11 de octubre de 2015

Vieja amiga oscuridad, Contigo quiero conversar. Poco importa ya lo que yo vi mas siempre estará dentro de mi. Una extraña pesadilla con la luz de neón, Y el ritmo del silencio. En mis inquietos sueños vi Inmensas calles sin final, Caminaba gente por allí Caminaba sin buscar un fin. Y de pronto, vi una luz en la calle que me cegó. En medio del silencio, Y junto aquella fuerte luz, La gente hablaba sin hablar, La gente sin cantar también cantó. Algo que yo nunca comprendí, Porque aquella gente jamás llegaría a perturbar El ritmo del silencio. Yo les dije y les grité El silencio crecerá, Y podrá llegar un día que De vosotros se adueñará. Pero noPRESTARON atención Siguieron en silencio. Y la gente se inclinó Adorando aquella luz, Nada se podía escuchar, Ni a lo lejos el rumor del mar, Porque a todos en mi sueño Vi buscar sin hallar el ritmo del silencio..

sábado, 3 de octubre de 2015

Caminant - Roger Mas (Jacint Verdaguer) - cover / tutorial

Jacinto Verdaguer Caminante

Jacint Verdaguer


El conocido como “Príncipe de los ”, nació un día como hoy.

“Caminante”

Medio siglo hace que por el mundo
voy, camina que camina,
por escabrosos senderos
junto al gran río de la vida.
Veo ir y veo venir
las olas resbaladizas:
las que vienen llevan flores
y alguna hoja marchita,
mas las olas que se van
esas todas llevan ruinas.
De las que me pasan por encima otras las traspasaran en seguida.
Una barca por el río
de una orilla a la otra orilla;
pone cara de segador
la barquera que la guía.
Quien se deja embarcar,
nunca más vuelve a su tierra natal,
y se despierta en otro mundo
después de quedarse dormido.
Barquera del buen Dios,
no me pongas la cara triste:
si vienes a por mí,
embárcame enseguida;
el destierro se me hace largo,
quiero ver la otra orilla,
mis ojos tienen sueño
y el caminar me fatiga.
Jacinto Verdaguer
Desconozco el autor de la traducción
Poema original en catalán:
“Caminant”
Mig segle fa que pel món
vaig, camina que camina,
per escabrós viarany
vora el gran riu de la vida.
Veig anar i veig venir
les ones rodoladisses:
les que vénen duen flors
i alguna fulla marcida,
mes les ones que se’n van
totes s’enduen ruïnes.
De les que em vénen damunt
quina vindrà per les mies?
Una barca va pel riu
d’una riba a l’altra riba;
fa cara de segador
la barquera que la guia.
Qui es deixa embarcar, mai més
torna a sa terra nadiua,
i es desperta a l’altre món
quan ha feta una dormida.
Barquereta del bon Déu,
no em faces la cara trista:
si tanmateix vens per mi,
embarca’m tot de seguida;
lo desterro se’m fa llarg,
cuita a dur-me a l’altra riba,
que mos ullets tenen son
i el caminar m’afadiga.
Jacinto Verdaguer
Jacinto Verdaguer y Santaló nacio en Folgarolas, Osona, Barcelona, el 17 de mayo de 1845.
El 24 de septiembre de 1870 fue ordenado sacerdote en Vich.
Escribió su obra en castellano y en catalán.
Murió en Vallvidrera (hoy distrito Sarrià-Sant Gervasi de Barcelona), el 10 de junio de 1902.

Jacint Verdaguer es el escritor catalán más importante de la Renaixença. Su obra comprende géneros y estilos muy diferentes -épica, lírica, prosa- y en todos sobresale de manera extraordinaria. Contribuyó decisivamente a la creación de una lengua literaria después de siglos de abandono y de predominio del español. Tanto por los temas que trató como por su estilo, tuvo una gran repercusión internacional y, al mismo tiempo, fueACEPTADO por las clases populares. Su biografía, además, presenta episodios de resonancia pública que ayudaron a su consolidación como el escritor más representativo de la Cataluña del siglo XIX.

Vida

Jacint Verdaguer i Santaló nació en Folgueroles (comarca de Osona, Girona) el 17 de mayo de 1845, en una familia de campesinos modesta pero relativamente ilustrada. A los diez años ingresó en el Seminario de Vic, dondeCURSÓ estudios eclesiásticos. En 1870 fue ordenado sacerdote y celebró su primera misa en la capilla de Sant Jordi de Puigseslloses. De 1863 a 1871 residió en can Tona, una masía a medio camino entre Vic y Folgueroles, donde escribió sus primeras obras literarias.

Después de ejercer de vicario en Vinyoles de Orís (1871-1873), y afectado de fuertes cefalalgias, pasó dos años haciendo el trayecto de España a Cuba, como capellán de barco, en los vapores de la Compañía Transatlántica de Antoni López, futuro marqués de Comillas. En 1877 entró a su servicio como capellán de la familia, y seis años más tarde le fue confiado el cargo de limosnero. Durante los más de quince años que vivió en el palacio de los Comillas, en la Rambla de Barcelona, Verdaguer tuvo ocasión de tratar a personalidades de la alta sociedad de su tiempo y realizar largas excursiones por el Pirineo, pasar estancias en balnearios y residencias del marqués, y llevar a cabo importantes viajes por el norte de África, los países de Europa central y Oriente Próximo, de los que dejó constancia literaria.

En 1886, de vuelta de un viaje a Tierra Santa, sufrió una crisis espiritual que le provocó un deseo de purificación y de ascetismo, crisis que coincidió con un incremento de las funciones propias de su ministerio y, más concretamente, de las derivadas de su cargo de limosnero. A partir de 1889 entró en contacto con videntes y practicantes de exorcismos, y pronto se convirtió en propagador de estas actividades, desaconsejadas por la Iglesia y prohibidas por el obispo de Barcelona. Endeudado Verdaguer por la compra de una finca en Vallcarca, para salvar una capilla y establecer allí un lugar de oración y de penitencia, Claudi López, el segundo marqués de Comillas, decidió prescindir de sus servicios como limosnero y, con los obispos de Barcelona y de Vic -Catalán y Morgades respectivamente-, planeó su traslado a esta última localidad, capital de la comarca de Osona, con el pretexto de una cura de reposo. Después de unos días en el palacio episcopal de Vic, en mayo de 1893 Verdaguer se instaló en el santuario mariano de la Gleba, donde residió dos años.

En abril de 1895, contraviniendo las órdenes de su obispo, abandonó la Gleba y se estableció en Barcelona, en el domicilio particular de la familia Duran -formada por una viuda y sus dos hijas-, con la que había entrado en relación unos años antes. En el mes de junio publicó un comunicado en la prensa de Barcelona en que se declaraba, "ante la gente honrada" de la ciudad, víctima de una persecución injusta. Morgades le prohibió celebrar misa y ejercer las demás funciones sacerdotales. Verdaguer respondió a la prohibición con una serie de artículos periodísticos "en defensa propia", de gran impacto público. El enfrentamiento del sacerdote poeta con su superior eclesiástico, con el marqués que lo había acogido y con algunos de sus amigos íntimos y familiares (el canónigo Jaume Collell, el abogado -y primo suyo- Narcís Verdaguer i Callís...), adquirió una dimensión social que trascendió el marco estrictamente eclesiástico. El escándalo fue clamoroso. El "caso Verdaguer" se convirtió en el centro de intereses sociales y políticos opuestos. Dos años después entregó una segunda serie de artículos a la prensa, todavía más virulentos y agresivos. A finales de 1897, sin embargo, por intervención de los padres agustinos de El Escorial y del obispo de Madrid, Morgades se avino a una reconciliación, formalizada con la aceptación de un escrito de retractación de Verdaguer, y en enero del añoSIGUIENTE obtuvo de nuevo las licencias sacerdotales.

Se le otorgó un beneficio en la iglesia de Belén de Barcelona y allí vivió sus últimos años, hasta que, víctima de la tuberculosis, y tras una larga enfermedad, fue trasladado a villa Joana, en Vallvidrera, donde murió el 10 de junio de 1902. Tres días después, fue enterrado en el cementerio de Montjuïc, en Barcelona, en medio de la manifestación de luto más impresionante de la historia de Cataluña.

Obra

Verdaguer manifestó desde muy joven una notable aptitud literaria. Después de unas primeras poesías de carácter satírico y jocoso, en la línea de las composiciones barrocas y populares de la literatura catalana moderna, cultivó la poesía de tema bucólico y amoroso, siguiendo los modelos de la preceptiva neoclásica, de influencia castellana, o sirviéndose de los patrones más habituales en la poesía catalana popular (coplas ...), o, incluso, imitando el modelo romántico de la Mirèio de Frederic Mistral. Una parte de estas composiciones tempranas se publicó póstumamente (Amors de Jordi y na Guideta [Amores de Jordi y Guideta], 1924; Jovenívoles [Juvenalias], 1925).

Durante los años de formación, Verdaguer ensayó diversos géneros literarios: un poema épico en prosa sobre el descubrimiento de América (inacabado y publicado, de forma póstuma, con el título de Colom) [Colón], narraciones fantasiosas y escritos autobiográficos (inéditos hasta hace poco) y, sobre todo, un extenso poema deFACTURA neoclásica, Dos màrtirs de ma patria, o siga Llucià y Marcià [Dos mártires de mi patria, o sea, Luciano y Marciano], que publicó en 1865, como folletín, el periódico de VicEco de la Montaña. El mes de mayo del mismo año, Verdaguer se dio a conocer en los Jocs Florals de Barcelona, donde obtuvo un accésit y un premio extraordinario por dos composiciones en verso, de tema patriótico y de orientación romántica. Estas distinciones le valieron el reconocimiento de los promotores de estos juegos, y le procuraron contactos personales -decisivos en su futura carrera literaria- con las figuras más destacadas de la Renaixença (Milà, Aguiló...).

Animado por los estímulos recibidos en Barcelona, Verdaguer retomó el tema colombino en una extensa composición poética, L'Espanya naixent [La España naciente], que presentó, sin éxito, a los Jocs Florals de 1868. Al cabo de poco, empezó a trabajar en un proyecto más ambicioso, que le valdría, casi diez años después, el reconocimiento literario dentro y fuera de Cataluña: el poema épico L'Atlàntida [La Atlántida], premio extraordinario en los Jocs Florals de Barcelona de 1877, de concepción grandiosa, con elementos geológicos y figuras mitológicas de una gran fuerza descriptiva. Dos años después dio a la imprenta el volumen Idil·lis y cants místics [Idilios y cantos místicos], composiciones líricas de tema religioso y de una gran delicadeza, queCONFIRMARON la valía literaria de Verdaguer para el cultivo de géneros bien diversos.

En 1880, con motivo del milenario de Montserrat, publicó Cançons de Montserrat [Canciones de Montserrat] y Llegenda de Montserrat [Leyenda de Montserrat], que rescribió y unificó, años después, en el volumen poético Montserrat (1889). Dos años después, dio a conocer una primera versión de Lo somni de sant Joan [El sueño de san Juan], refundida y ampliada en un volumen homónimo posterior (1887), y una recopilación de romances de tema franciscano que, al cabo de unos años, reelaborará en un volumen dedicado al poverello de Asís (Sant Francesc [San Francisco], 1895). A finales de 1885, después de la recopilación poética Caritat y de la traducción de Nerto, de Frederic Mistral, Verdaguer publicó Canigó -considerado su mejor poema épico-, que le valió la coronación simbólica, por el obispo Morgades, como "poeta de Cataluña". Si L'Atlàntida era una epopeya de corte clásico, con una visión hispánica del descubrimiento del Nuevo Mundo, Canigó era una "leyenda" romántica, dedicada a exaltar los orígenes cristianos de Cataluña. Otro volumen misceláneo, también en la línea del romanticismo,Pàtria (1888), lo acabó de consagrar como poeta nacional. En 1887 había reunido en un volumen, con el título de Excursions y viatges [Excursiones y viajes], las impresiones literarias aparecidas como reportajes periodísticos en diversas publicaciones, y en 1889 dio a la imprenta un segundo libro de viajes -Dietari d'un pelegrí a Terra Santa [Dietario de un peregrino en Tierra Santa]-, que ha sido considerado su mejor obra en prosa.

Al inicio del último decenio, publicó la trilogía poética Jesús infant [Jesús niño], compuesta a partir de sus vivencias en Palestina, y formada por tres libros: Nazaret (1890), Betlem (1891) y La fugida a Egipte [La huida a Egipto](1893). Coincidiendo con su estancia en el santuario de la Gleba y con los inicios de su conflicto eclesiástico, dio a la luz el poema Sant Francesc (1895) ya citado, y las recopilaciones misceláneas Roser de tot l'any [Rosal de todo el año] (1893), Veus del Bon Pastor [Voces del Buen Pastor] (1894) y Flors del Calvari [Flores del Calvario](1896), que se puede considerar un correlato poético de la primera serie de artículos periodísticos, reunidos en volumen con el título En defensa pròpia(1895).

En sus últimos años aceptó la dirección literaria de algunas revistas -L'AtlàntidaLa Creu del Montseny yLo Pensament Català-, y dio a la imprenta tres obras poéticas más: Santa Eulària (1899), Aires del Montseny (1901) y Flors de Maria (1902). De forma póstuma aparecieron los volúmenes poéticos Al Cel[Al Cielo], Corpus Christi (1903) y Eucarístiques (1904), una recopilación de Rondalles [Cuentos] y una recopilación de Discursos (1905), seguidos de un volumen titulado Folklore (1907), una reanudación poética de los temas colombinos -Colom, seguit de Tenerife [Colón seguido de Tenerife] (1907)-, un volumen que integraba dos obras en verso -Els pobres. Els sants (1908)-, unas glosas lulianas intituladasPerles del "Llibre d'Amic e d'Amat" [Perlas del "Libro de Amigo y Amado"] (1908), y una versión en catalán del Cantar de los Cantares precedida de Els jardins de Salomó [Los jardines de Salomón] (1907).

Dos volúmenes de Escrits inèdits [Escritos inéditos] (1958 y 1978), una recopilación complementaria dePoesies juvenils inèdites (1966) y un extenso Epistolari (1959-1993) completan, por lo que sabemos hasta hoy, la producción literaria de Verdaguer, y constituyen una fuente documental y biográfica de primer orden.

Jacint Verdaguer fue el escritor catalán más destacado del siglo XIX y el más representativo de laRenaixença literaria catalana. Autor de obras cultas de una gran ambición, se sirvió de temas y formas populares para transmitir las ideas del catalanismo conservador y del catolicismo de su tiempo. Devolvió a la lengua catalana el prestigio perdido como idioma de cultura, y, a pesar de sus desequilibrios, llevó a cabo una obra perfectamente coherente, al servicio de los ideales de la fe y de la patria. Ha sido utilizado desde posturas ideológicas opuestas e invocado, sobre todo, como símbolo de catalanidad. Su eficacia expresiva y la resonancia social de su conflicto le procuraron, ya en vida, una estima popular más personal que literaria, en perjuicio de una valoración estrictamente artística. Aunque su figura es aún hoy objeto de debate, su obra ha adquirido la consideración de clásica.
D'aquest poeta, se n'han dit moltes coses i per més que us n'expliquésSEGUR que me'n deixaria. Per què? Perquè hi ha un abans i un després en la poesia catalana marcat per la figura d'aquest mossèn de poble i de família pagesa. Perquè va ser una mena de geni de la llengua capaç de retornar-li el prestigi perdut en l'àmbit de la literatura culta sense perdre l'expressivitat de la llengua del poble més humil i senzilla.

El vídeo que usPRESENTO a continuació és una versió musicada del poema "Caminant" del recull Al cel. Roger Mas li dóna vida i el fa actual. Us demano que comenteu al bloc quines idees us transmet el poema i quins aspectes el relacionen amb el poema "Vora la mar".



Jacint Verdaguer. Caminant


Mig segle fa que pel món
vaig, camina que camina,
per escabrós viarany
vora el gran riu de la vida.
Veig anar i veig venir
les ones rodoladisses:
les que vénen duen flors
i alguna fulla marcida,
mes les ones que se’n van
totes s’enduen ruïnes.
De les que em vénen damunt
quina vindrà per les mies?
Una barca va pel riu
d’una riba a l’altra riba;
fa cara de segador
la barquera que la guia.
Qui es deixa embarcar, mai més
torna a sa terra nadiua,
i es desperta a l’altre món
quan ha feta una dormida.
Barquereta del bon Déu,
no em faces la cara trista:
si tanmateix vens per mi,
embarca’m tot de seguida;
lo desterro se’m fa llarg,
cuita a dur-me a l’altra riba,
que mos ullets tenen son
i el caminar m’afadiga.